Capítulo 95 Poder mental

 Daneel no era como los demás niños, y lo sabía. Desde que cumplió 10 años se dio cuenta. No empezó de golpe, fue algo gradual. Pero comenzo a oir voces, al principio pensó que se volvía loco, pero era un niño inteligente, pudo sentir que oía los pensamientos de las personas. 

Con el tiempo y mucha práctica, también pudo plantar sus ideas en otros cerebros. Así logro que sus padres y profesores nunca lo culparan de sus fechorías. Cuando no sabía algo en el aula plantaba la idea en los profesores de que no le preguntaran, y se volvió bueno en eso, muy bueno. 

Una noche en su cuarto pudo oir una voz que no era habitual, no eran sus padres ni un vecino. Enseguida supo que no estaba sólo y no tenía buenas intenciones. Había un demonio en su habitación y venía por el. Al principio se asustó, mucho, casi entra en pánico. Cuando se calmó enseguida se le ocurrió una idea, Lishuan, el abusador del aula, trataría de desviar la atención del demonio. Después de varios minutos de concentración dejo de oírlo, entonces se durmió, no muy tranquilo.

Al día siguiente en la escuela había una agitación enorme, la policía estaba investigando la muerte de lishuan el día anterior. Se acordó de lo que había sucedido en su habitación y pensó si volvería por el o todo habría acabado. Tendría que esperar a la noche.

Cuando oscureció subió a su cuarto aterrorizado. No pasó mucho tiempo hasta que volvió a escuchar la voz del demonio en su cabeza, pero no venía por el, le estaba pidiendo un nombre, un objetivo. El demonio lo obedecía, esperaba su orden.

Se sintió aliviado al principio, pero después un sentimiento de superioridad y poder lo invadió. Después de todo, cuanta gente podía presumir de tener un demonio particular que cumplía sus deseos.